Uncategorized

Arthur Shopenhauer: El mundo como voluntad y representación

Editorial Porrúa

Cuando yo abandonaba mi alma a la impresión del arte de los sonidos y volvía luego a la reflexión, recordando el curso de las ideas desarrolladas en esta obra, encontraba pronto un rayo de luz sobre su esencia secreta y sobre la índole de sus relaciones imitativas con el mundo, supuestas por analogía, rayo de luz suficiente para mí y para mi investigación y aun para aquellos que hasta aquí me hayan seguido con atención y compartan conmigo cierta concepción del mundo. Pero comunicar yo mismo esta explicación es cosa que considero absolutamente imposible. En efecto, esta explicación supone una relación de la música como representación que es con algo que nunca puede ser representación y considera a la música como imitación de un modelo que no puede ser representado inmediatamente. Por esta razón no puedo hacer otra cosa en este tercer libro, consagrado especialmente al estudio de las bellas artes, que exponer mi opinión sobre el arte maravilloso de los sonidos, y la aceptación o reprobación de ella dependerá del efecto que produzcan sobre cada lector, por una parte la música y por otra todos y cada uno de los pensamientos expuestos aquí por mí. Además, para que mi explicación del sentido de la música pueda ser aceptada con perfecto conocimiento de causa, creo necesario que se oiga la música con interrumpida reflexión y que el oyente esté perfectamente familiarizado con mis teorías.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *