Mary Halvorson: Dragon's Head

Old Nine Two Six Four Two Dies (No. 10), Momentary Lapse (No. 1), Screws Loose (No. 8), Scant Frame (No. 2), Sweeter Than You (No. 4), Sank Silver Purple White (No. 5), Too Many Ties (No. 6), Totally Opaque (No. 7), Dragon's Head (No. 9), April April May (No. 3)

Músicos:
Mary Halvorson: guitarra
John Herbert: bajo
Ches Smith: batería

Firehouse 12, 2008

Calificación: Dame dos

No basta con ser joven. Es preciso estar borracho de juventud. Con todas sus consecuencias (Alejandro Casona)

Mary Halvorson, con apenas 28 años de edad, se ha constituido en una de las guitarristas más promisorias de la nueva música creativa. En la manera en que manifiesta su habilidad instrumental y en el tratamiento exploratorio para la construcción de su sonido, subyacen innovadores conceptos que tienden a reformular y revitalizar el rol de la guitarra eléctrica como instrumento protagónico.
En el estilo de Halvorson el uso de frases irregulares, oblicuas resonancias armónicas, acordes no ortodoxos y cáusticas texturas conviven con estratégicos arpegios, un seductor ejercicio de la abstracción, una flexible dinámica de la distorsión y una intrigante ráfaga de efectos y loops. Elementos que terminan por configurar un discurso propio que la ubica por delante de muchos de los guitarristas de su tiempo.
Esa autoridad que expone en su alegato musical, no hace más que extrapolar sus antecedentes. Halvorson, en su corta pero fructífera carrera, siempre ha estado involucrada en proyectos iconoclastas y transformadores. Es una habitual colaboradora del compositor y multi-instrumentista Anthony Braxton, a quien acompaña en su sexteto, en el Braxton’s Twelvetet y en el Diamon Curtain Wall Trio.
También formo parte del Trevor Dunn’s Trio Convulsant y participó de diferentes ensambles liderados por Taylor Ho Bynum, Tony Malaby, Curtis Hasselbring y Ted Reichman, entre otros.
Halvorson, ademas, co-lidera sendos proyectos en dúo: el grupo de avant- rock People, junto a Kevin Shea (baterista de Mostly Other People do the Killing) y otro orientado al folk de vanguardia con la violista, violinista y compositora Jessica Pavone, que se materializó en los álbumes Prairies de 2005 y On and Off de 2007.
Dragon's Head no es el primer disco de Halvorson pero sí el primero en el que representa la totalidad de su capacidad como compositora e improvisadora, permitiéndose manifestar cabalmente su abstruso sentido de la melodía y la infrecuente habilidad para desplegar al mismo tiempo un exuberante lirismo y un cerebral ejercicio de seducción armónica.

Dragon's Head es un título que amerita distintas interpretaciones.
Ante todo corresponde aclarar que el dragón es un animal fabuloso al que se atribuye forma de serpiente muy corpulenta con pies y alas y de extraña fiereza y voracidad. Pese a que supe tener una suegra en la que esta descripción calza a la perfección, el dragón es un ser mitológico y, por ende, expresa una visión distorsionada de la realidad. Bueno, mi suegra también.
El inolvidable y no menos mitológico Carlos Timoteo Williams, en su ensayo “Los Dragones son todos drogones”, intentó comprobar sin éxito que los dragones no existían. Tiempo después de la publicación de ese estudio, Williams hallaría una trágica muerte en misteriosas circunstancias. Lo ocurrido, aún hoy, sigue siendo un enigma; pero quizás el misterio esté revelado en el curioso epitafio inscripto en su tumba: “Tenga cuidado. Los dragones son muy rencorosos.”

La frase Dragon's Head (en castellano cabeza de dragón y en latín caput draconis) se aplica en astrología y astronomía antigua para describir los nodos ascendente y descendente de la órbita de La Luna. Los nodos retrogradan sobre la Eclíptica dando una vuelta en 18.6 años. Dicho movimiento no es uniforme, ya que en épocas su velocidad es el doble de la media y en otras es nula y los nodos son estacionarios. Esto ocurre cuando el Sol está en el Nodo y se anula la componente de la fuerza que causa este desplazamiento, o para decirlo en lenguaje sencillo, cuando la órbita de la Luna esta naboinclinada 5º 8' respecto a la Eclíptica.
Creo que esto último nos exime de mayores explicaciones.
Después de todo… ¿quién no ha visto un naboinclinado alguna vez, no?
Caput draconis es también una figura utilizada en el sistema de adivinación conocido como geomancia y una clave mágica que aparece en el libro Harry Potter and the Philosopher’s Stone.
Además, el Dracocephalum o "cabeza de dragón" es un género de alrededor de 45 especies de plantas de flores nativas de las regiones templadas del hemisferio norte, perteneciente a la familia Lamiaceae. Es decir: papá Lamiaceae, mamá Lamiaceae y los lamiaceaeitos. Un varón y una nena. O sea, una familia Lamiaceae tipo.
Asimismo Dragon Head es un conocido manga de genero seinen escrito por Minetaro Mochizuki. Y aunque también es de género, cuando digo manga no me refiero a la parte del vestido en que se mete el brazo sino a un tipo de historieta desarrollado en Japón que obtuviera reconocimiento mundial.
Publicado entre los años 1994 y 2000 en la revista Young Magazine, Dragon Head es un relato de supervivencia y terror psicológico.
En su núcleo argumental, un tren descarrila dentro de un túnel y sólo sobreviven tres adolescentes: una chica y dos muchachos.
Y, creer o reventar, justamente una chica (Mary Halvorson) y dos muchachos (John Herbert y Ches Smith) son los que participan del álbum Dragon's Head.

Halvorson acepta el riesgo de experimentar diversas formas compositivas: jazz, punk alternativo, indie rock, libre improvisación, pop, folk, etc. Pero en esa excursión Smith y Herbert no sólo aportan la flexibilidad que esa búsqueda requiere, sino que también ofrecen un flujo de interacción continuo que termina por otorgarle al proyecto una identidad grupal y un impulso dinámico compacto y convincente.

El álbum inicia con Old Nine Two Six Four Two Dies (No. 10). Un desarrollo melódico de imprevisible direccionalidad propulsado por un flujo de energía de intensidades contrastantes. Una inasequible aproximación al caos, plena de líneas ondulantes de bajo y patrones rítmicos fracturados en los que Halvorson y sus muchachos confirman su destreza para navegar en aguas turbulentas.
En Momentary Lapse (No. 1) hallamos vigorosas disonancias e intervalos de progresiones armónicas con cambios permanentes de tempo en los que los principios de restricción y rigidez y libertad y exploración parecen alternarse con naturalidad.
El contrabajo de John Herbert, el experimentado colaborador de Andrew Hill, es la columna vertebral del edificio sonoro; mientras que el baterista Ches Smith sorprende por su variedad de recursos matizando y acentuando sin perder el pulso. Sobre esa sección rítmica Halvorson dispara fraseos infrecuentes y oscilantes efectos para terminar de homologar una estética que, siendo muy personal, no elude su admiración por Jimi Hendrix, Robert Wyatt y el guitarrista de Deerhoof, John Dieterich.
Screws Loose (No. 8), con sus dos minutos y medio de duración, es una episódica profundización de la línea exploratoria que distingue a este álbum, mientras que Scant Frame (No. 2) fluctúa entre múltiples tempos y espaciosas cadencias. Extraño, diferente, raro. Pero no algo raro que bordea lo ridículo como podría ser… no sé… un esquimal en ojotas… sino raro e interesante.
Como una gallina con labios.
Es sólo un ejemplo.

Los obsesivos acordes iniciales de Sweeter Than You (No. 4) recuerdan al King Crimson de Indiscipline para luego mutar en un enigmático juego de intensidades que desembocan en una explosiva catarsis improvisadora con reminiscencias del Nels Cline Singers. En tanto que la sencillez melódica de Sank Silver Purple White (No. 5) se viste con hipnóticos acordes y un atinado solo de batería a cargo de Smith.
Too Many Ties (No. 6) es una lucha sonora, signada por las texturas generadas a partir de la imaginativa guitarra de Halvorson, que se desvanece en un magnífico pasaje en solitario del contrabajo de John Herbert.
En Totally Opaque (No. 7) se aproximan a conceptos enarbolados por el rock progresivo pero rehuyendo deliberadamente el virtuosismo vacío a través de estratégicos silencios, formas inherentes al minimalismo y la esporádica incorporación de disonancias. Dragon's Head (No. 9) dibuja una parábola que une la libre improvisación y el rock alternativo, rubricado por lacerantes acordes de guitarra.
El cierre será con el aletargado y envolvente desarrollo de April April May (No. 3).
Mary Halvorson, en Dragon's Head, demuestra que es posible recorrer caminos que otros no transitaron. Sólo hace falta conocer el pasado y valor para enfrentar el futuro.

La sangre joven no obedece un viejo mandato. (William Shakespeare)

Sergio Piccirilli