Scott Amendola: Ser Líder No Es Fácil Para Nadie

¿Piensan en el futuro hacer más shows con la banda?

Sí, tenemos pensado hacer algunos más en el 2006.

¿Estará Jeff Parker en esas presentaciones?

Estamos trabajando en eso. Espero contar con Jeff.

Cuando componés ¿con qué instrumento lo hacés?

Básicamente uso piano…

¿Y entonces por qué no tenés un pianista en tu banda? (risas)

Hace poco tiempo estuve de gira con el pianista Art Hirahara. Pero tengo que decir que es muy difícil salir de gira con un piano ya que en la mayoría de los lugares en donde tocamos no hay pianos o no suenan bien. Igual, con Art (Hirahara) a veces salimos de San Francisco y hacemos algunos shows en trío, lo cual es bastante divertido.

Vos tocaste durante la mayor parte de este año con Madeleine Peyroux. ¿Cómo fue tu experiencia con ella?

Amo tocar con Madeleine. Ella es muy profunda. Como músico es asombrosa. He aprendido mucho tocando con ella. Además disfruto mucho al usar escobillas toda la noche. Cada noche la música es diferente. El intercambio con la audiencia ha sido muy inspirador para mí. Con Madeleine somos amigos de verdad. Tenemos previsto seguir tocando a fines de este año y durante el 2006.

Ella estará tocando en Argentina en noviembre. ¿Por qué no estarás allí?

Mi esposa y yo estamos esperando en cualquier momento la llegada de nuestro primer hijo.

¿Conocés algo de la música que se hace en Argentina?

No conozco nada de la música que se hace allí. Me disculpo por ello. Espero visitar pronto Argentina, ir de gira y conocer más de lo que pasa allá.

Durante la noche en el Club Tropical mencionaste a Daniel Volpini. ¿Cómo lo conociste?

Creo, si mal no recuerdo, que él me envió un e-mail y algo de su música. Fue hace algún tiempo. Me pareció un buen tipo y creo que es bastante conocido allá.  Aprecié mucho su entusiasmo por la música en general y por la batería en particular.

Y ya que estamos hablando de bateristas… ¿a quién admirás?

Admiro a un montón de tipos. Paul Motian es uno de los grandes, para mí. Tony Allen, Jack DeJohnette, Clyde Stubblefield, John “Jabo” Starks, Elvin Jones, Baby Dodds, Dan Rieser, Jim Keltner… ¡una tonelada de gente! Hay muchos bateristas y muy buenos dando vueltas…

¿Es más difícil para un baterista que para otro músico ser líder de una banda?

No pienso que ser líder sea fácil para nadie. Liderar un grupo lleva mucho trabajo. A mí me gusta pero es un gran desafío tener que pensar en todo, desde la música a los pasajes de avión, habitaciones de hotel y todo ese asunto. No tengo manager así que se hace difícil tener tantas responsabilidades. 

Pero debe haber alguna recompensa…

Claro, al final del día tocás y ésa siempre es la mejor recompensa. Y hacerlo, como ahora, con estos músicos increíbles es una recompensa que está más allá de lo que pueda expresar con palabras.

Gente como vos o Charlie Hunter son íconos del nuevo jazz de la costa oeste. Juntos, formaron TJ Kirk. ¿Qué significó en tu carrera participar allí?

TJ Kirk fue una banda realmente divertida. Fue la primer banda “real” en la que estuve. Desde el comienzo fue un trabajo colectivo. Ésa fue la idea de Charlie. Un gran cóctel de música y personalidades. Ninguno en la banda podía ser reemplazado. Era la suma exacta de las todas las partes, como algo indivisible.

¿Tenés pensado volver a hacer algo junto con Charlie Hunter?

Eso espero. Tenemos mucha onda entre nosotros, así que estoy seguro que en algún momento volveremos a juntarnos.