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Haydée Schvartz – Gabriela Bernasconi: Tangos insólitos

Tango d’Antan (Dane Rudhyar), Le tango perpétuel (Erik Satie), Perpetual Tango (John Cage), Tango des fratellini (Dariiusz Milhaud), Tango (Dimitri Shostakovich), Tango Rag (Mario Lavista), Tango Ballade (Kurt Weill), Viernes santo y lluvioso (Gerardo Gandini), Tango (Isaac Albéniz), Tango (Igor Stravinsky), Nostálgico (Juan José Castro), Piccolo Tango (Giacomo Puccini), Tempo di Tango (Aaron Copland), Tan gozoso (Jorge Dájer), Tango? (Conlon Nancarrow)

Músicos:
Haydée Schvartz, Gabriela Bernasconi: piano

Los Años Luz, 2009

Calificación: Dame dos

Axel Krygier – Gonzalo Demaría – Alfredo Arias: 3 Tangos
Ese muerto soy yo, Un cabaret junto al Riachuelo, Rojo bemol, El gil pide boda, Un fiolo no llora, Un anillo y dos bebés, Chica de familia, Paté de caniche, Tango dei Pesci Volanti, Pesce da whisky, Walzer di Magdala, Ballata di la Sirena, Dilemma, Il Fodiator dice addio, É troppo tre, I pesci hanno corna, Epílogo Pesci Volanti, Nous sommes des morts, Queen of Rats, Taxi taxi taxi, Torch song, Bruno – Bruna, Je suis arrivé, La salamandre, Double traîtrise, Cointreau-bolero, Je te brûle le lard, Coui – Coui, Tango Rat

Músicos:
Marta Roca: violín 1
Guadalupe Tobarías: violín 2
Alejandro Terán: viola
Gastón Colloca: violoncello
Nicolás Rainone: contrabajo, bajo eléctrico
Diego Arcaute: batería
Leo Heras: clarinete, clarinete bajo
Miguel Angel Tallarita: trompeta, flugelhorn
Santiago Castellani: trombón, tuba
Horacio Burgos: guitarra criolla, guitarra acústica
Juan Núñez: bandoneón
Pedro Onetto: piano
Axel Krygier: sintetizador, piano Rhodes, órgano, flauta traversa, acordeón (bajo eléctrico, piano y coros en "Torch Song")
Alejandra Radano: voz (Ada, Magdala, Martine)
Carlos Casella: voz (El Guitarrista, Il Capitano, Bruno – Bruna)
Marcos Montes: voz (Insúa, L’ubriaco, L’artiste)

Los Años Luz, 2009

Calificación: Está bien

Ante la aparición de estos dos álbumes, la tentación por realizar un repaso histórico del nacimiento del tango y su evolución (o no) es grande. Trataremos de no caer en ella (en la tentación). Sí diremos que el inicio del estilo navega por mares y ríos dudosos. Las alternativas que rápidamente aparecen son tres: ceñirnos arbitrariamente a una de las teorías, describir en forma pormenorizada todas y cada una de ellas o bien hacer una suerte de subjetivo resumen.
Existe otra posibilidad: no hacernos cargo de nada y que usted ejercite su curiosidad y búsqueda para, así, llegar a lo más parecido a la verdad.
Algo complicado, más aún si tenemos en cuenta que es muy probable que ante la audición tanto de Tangos insólitos como de 3 Tangos, los puristas del género sufran mutaciones inesperadas adoptando características insospechadas que, en un caso que podríamos denominar extremo, puede llegar a cristalizarse en un repentino suicidio en masa.
Tranquilícese… apelando a cierto toque delarruístico o cobosiano, podemos (casi) afirmar que el tango se gestó a ambos márgenes del Río de la Plata (esto es: Argentina y Uruguay) entre 1850 y 1890. Sí… cuarenta años puede parecerle un lapso excesivo a la hora de situar el nacimiento de una música contemporánea, pero ya anticipamos que si algo no abundaba en ese aspecto era la certeza. Y se sabe que el que avisa no es traidor. Tal vez le resulte más elegante “en la segunda mitad del siglo 19” y todos (o al menos algunos) contentos.
Tampoco quiero adentrarme en cuestiones espinosas como que, al principio, era bailado exclusivamente por hombres. Si tenemos en cuenta que hoy día su danza es considerada de las más sensuales del planeta… Y además… los barrios bajos, los burdeles, los facones, el lunfardo, las orquestas, el bandoneón, el arrabal, el alcohol, las drogas (te juro), los guapos, el funyi, Gardel, Troilo, Goyeneche, Piazzolla, Rodolfo Valentino, Al Pacino, los japoneses y el tango electrónico.

Cecilia Kamen es docente e investigadora; reside en México desde 1979 y, en su vinculación con el tango se preocupó (afortunadamente) más por sus diferentes propuestas sonoras que por recolectar hechos, fechas y personalidades al estilo de un diccionario Kapelusz. Kamen es, además, la responsable de la idea, selección y coordinación del material incluido en Tangos insólitos. En su investigación halló que varios de los más renombrados compositores de los siglos XIX y XX tuvieron su coqueteo con el tango. Por ello es que aquí aparecen composiciones, entre otros, de Satie, Stravinsky, Aaron Copland, Shostakovich, Kurt Weill, John Cage, Albéniz y Puccini junto con el Viernes santo y lluvioso de Gerardo Gandini.
Las pianistas seleccionadas para la interpretación del repertorio han sido las notables Haydée Schvartz (en 9 tracks) y Gabriela Bernasconi (en cinco). Juntas, a cuatro manos, maravillan con Tango, de Dmitri Shostakovich.
Tangos insólitos es un trabajo extraordinario desde su concepción, la selección y la interpretación. Son tangos (¿son tangos?) a la manera de cada uno de los autores. Resulta difícil, si no imposible o al menos inapropiado, destacar algunas composiciones por sobre otras por el sencillo motivo que tanto Schvartz como Bernasconi han sabido respetar en gran forma el espíritu de cada autor.
El álbum demuestra, entre muchas otras cosas, el carácter de universalidad del tango mediante una sucesión de (si se me permite) fotografías auditivas de alta definición. Notable; e indispensable para comprender más de cuatro cosas.

Por su parte, 3 Tangos sorprende al presentarse como una suerte de ópera contemporánea. En realidad se trata de 3 “mini óperas”: Vampira en rojo bemol (en castellano), Pesci volanti (en italiano) y Le Rat de la contrescarpe (en francés). El libreto estuvo a cargo de Gonzalo Demaría y Alfredo Arias y la música fue responsabilidad de Axel Krygier.
En una entrevista que le realizáramos recientemente, el compositor declaró que con este trabajo se había divertido mucho (no hay dudas de esto) y que “casi no hay tango”. Aquí disentimos con el bueno de Krygier. Por supuesto que no se trata del típico tango tradicional de las grandes orquestas, ni del campero, ni… pero es tango. Ah… por las dudas… no es tango electrónico ni de cerca.
Musicalmente el álbum es impecable; también las historias, rebosantes de humor satírico, casi negro por momentos y, por supuesto, provocativo. Tenemos entonces textos y música en sintonía, muy buenos instrumentistas y dos vocalistas masculinos que no desentonan.
Pero…
3 Tangos se origina gracias a la iniciativa de Alejandra Radano. Quien a su vez es la vocalista femenina del proyecto, interpretando los personajes de Ada, Magdala y Martine. Radano protagonizó los musicales Chicago, Cabaret y La ópera de tres centavos, además de haber creado e interpretado Canciones degeneradas (espectáculo de 2002). Pero decíamos que había un pero. Y es que a Radano (de quien no ponemos ni mínimamente en duda sus cualidades vocales) no parece sentarle bien el estilo y, lamentablemente, su tendencia a los agudos hace que el álbum se torne, por momentos, difícil de sobrellevar.
Una pena, ya que 3 Tangos asoma como una magnífica idea que, por lo apuntado, nos dibuja una mueca de descontento que podría haberse evitado.

Marcelo Morales

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