Un Oscar para Osqui
Usted se preguntará por qué hacemos este comentario teatral en un espacio dedicado a la música y, además, sin tener los conocimientos necesarios para hacerlo. Y lo bien que hace. Pero permítanos esta excepción. Vale la pena, se lo aseguro.
Osqui Guzmán es, seguramente, uno de los mejores actores argentinos de la actualidad. Ha representado infinidad de obras, participado en numerosos programas televisivos y también incursionó en el cine. Una de las referencias más potentes de este notable improvisador, es su descollante faena en El Niño Argentino, junto con Mike Amigorena, otro actor extraordinario.
Osqui Guzmán decidió meterse en una misión ardua, compleja y arriesgada: adaptar e interpretar la mítica obra El Bululú que representara el gran José María Vilches en los años ’70 en más de 4.500 ocasiones. La verdad que en un principio opuse resistencia. Es que para quienes vimos en su momento la genial demostración actoral de Vilches, la comparación corría serio riesgo de ser algo más que odiosa. Pero finalmente asistimos al Teatro Nacional Cervantes y pudimos (todos) apreciar una deslumbrante actuación de Guzmán, quien supo incorporar, atinadamente y en la medida justa, elementos propios a una obra de la que se adueñó con respeto pero con singular autoridad.
Con dirección de Mauricio Dayub, El Bululú se representó en la sala Luisa Vehil del Teatro Nacional Cervantes hasta el 1 de agosto. Pero estén atentos. Seguramente El Bululú seguirá mostrando a ese “farsante que antiguamente representaba él solo, en los pueblos por donde pasaba, una comedia, loa o entremés, mudando la voz según la calidad de las personas que iban hablando”.
Cuyo sinónimo en su momento fue José María Vilches.
Y que actualmente compone con maestría un tal Osqui Guzmán.
