Pascal Niggenkemper, Simon Nabatov & Gerald Cleaver: Upcoming Hurricane
Pusteblume, Upcoming Hurricane, Árbol de Piedra, Aeolus, Fighting the Mill, Rahonavis, Mongolfiere
Músicos:
Pascal Niggenkemper: contrabajo
Simon Nabatov: piano
Gerald Cleaver: batería
Sello y año: NoBusiness, 2011
Calificación: Dame dos
No puede impedirse el viento, pero pueden construirse molinos (proverbio holandés)
La palabra viento, en su significado más habitual, designa a la “corriente de aire producida en la atmósfera por causas naturales” o “al movimiento en masa del aire en la atmósfera”; sin embargo, también existen otras acepciones de aplicación menos frecuente. Por ejemplo, se llama viento al olor que dejan como rastro las piezas de caza y, además, puede utilizarse para identificar aquello “que mueve o agita el ánimo con violencia o variedad”. Asimismo se denomina viento –entre otras cosas- al hueso que tienen los perros entre las orejas, a las actitudes de jactancia y vanidad de los individuos, a los instrumentos musicales de la familia de los aerófonos e incluso tiene el –poco honorable- significado de describir en lenguaje coloquial a la expulsión de gases intestinales. Está claro (y no por esto último precisamente) que el viento ha tenido una importancia capital en un sinnúmero de acontecimientos históricos, ya que ha sido una permanente fuente de progreso para la humanidad pero también el origen de catástrofes naturales o un elemento cuya presencia resultó determinante en el rumbo adoptado por diferentes civilizaciones y sociedades. El viento impulsó los viajes a través de los océanos y fue esencial en el desarrollo de la aeronavegación, tuvo influencia concluyente en batallas que cambiaron el curso de la historia y extendió el alcance del transporte más allá de los límites imaginables. El viento nos ha proporcionado una fuente inextinguible de energía; su capacidad de erosión y la intervención en los procesos eólicos pueden modificar el relieve geográfico y también se constituye -tanto por su influencia en el equilibrio de la atmósfera como en la producción del ciclo hidrológico- en uno de los factores primarios que explican la vida sobre la superficie terrestre.
La presencia del viento –en ocasiones ominosa y fatal, otras veces próspera y benefactora- también ha sido para el hombre un constante motivo de inspiración en el desarrollo de las artes. Así lo refleja la poesía en El Viento en la Isla de Pablo Neruda; la dramaturgia en La Tempestad de William Shakespeare y la narrativa en El Viento de Djemila de Albert Camus. En el arte pictórico el viento ha sido epicentro creativo de clásicos como El Molino y Cristo en la Tormenta sobre el Lago de Galilea de Rembrandt y El Nacimiento de Venus de Sandro Botticelli (cuadro en donde Venus aparece en brazos de Céfiro, el dios del Viento) o en obras contemporáneas como El Baile y el Viento de Oliver de León.
La música también nos ofrece numerosos ejemplos en donde el viento es un eje de inspiración; desde clásicos como el vals Entre Rayos y Truenos Óp. 324 de Johann Strauss, la Sonata para Piano No. 3 La Tempestad de Ludwig van Beethoven y The Tempest de Jean Sibelius hasta canciones populares como Wind Cries Mary de Jimi Hendrix, Wild is the Wind de Dimitri Thomkin y Ned Washington, The Eye of the Hurricane de Herbie Hancock, Dust in the Wind del grupo Kansas y Blowin’ in the Wind de Bob Dylan.
Lo cierto es que el viento también habita un espacio medular en el ideario estético del álbum que hoy nos ocupa: Upcoming Hurricane.
En este trabajo el trío que encabeza el ascendente contrabajista franco-alemán Pascal Niggenkemper (PN Trio, BaLoNi, Rosco Paje, HNH, Thomas Herberer’s Clarino, etc.) en compañía del notable pianista ruso Simon Nabatov (Roundup, Nabatov/Wogram Duo, ensamble Futurrr…, entre otros) y el experimentado baterista estadounidense Gerald Cleaver (Uncle June, Farmers by Nature, Violet Hour); el viento no sólo deja su impronta en el nombre del álbum y en los títulos de cada una de las piezas que lo integran sino que además se manifiesta en la idea rectora que lo impulsa. La propuesta de Upcoming Hurricane se funda en la libre improvisación pero sin recurrir a formas o estructuras preconcebidas ni con basamento en material compositivo previo sino privilegiando la intuición y la naturalidad en la comunicación entre los músicos e induciendo, desde esa perspectiva, al espontáneo surgimiento de un vínculo estético que conduzca al trío a construir su propia identidad y elaborar un taxativo temperamento sonoro.
El espíritu que circunda esta grabación parece enlazar deliberadamente la liberación de los dogmas y el ritual de la improvisación musical con el concepto del viento ya que -según afirma Pascal Niggenkempper– “su poder natural actúa como una metáfora universal de la libertad que reside en la improvisación” y simboliza de manera alegórica el “vínculo que permite unir a músicos de diferentes continentes y culturas” como los que integran este trío.
Un exquisito preludio en contrabajo con arco a cargo de Pascal Niggenkemper marca el camino de Pusteblume, título que refiere a una flor de la familia de las asteráceas conocida como diente de león, caracterizada por su semilla voladora. Ese atributo que -a instancias del viento- disemina las semillas perpetuando la especie, termina oficiando como una estampa cabal de los múltiples espacios creativos que van naciendo al conjuro de la improvisación.
El éxtasis rítmico y la contundencia polimodal del tema que da título al álbum –Upcoming Hurricane (en inglés, “próximo huracán”)- asciende pesadamente hasta coronarse en un clímax dramático subrayado de manera soberbia por la protagónica intervención del piano de Simon Nabatov.
El clima etéreo y angular de Árbol de Piedra debe su nombre al grupo de rocas volcánicas ubicadas en el desierto Siloli de Potosí (Bolivia) que, a causa de la erosión del viento, han adoptado una apariencia semejante a la de los árboles.
En cambio Aeolus – título que evoca al dios de los vientos en la mitología griega- se traduce en una serie melódica de fuerza creciente respaldada por un ostinato rítmico que –al igual que una tormenta de viento- tras alcanzar su caótico apogeo se diluye dejando una sensación de trágico lirismo.
Fighting the Mill (en inglés, “peleando contra el molino”) hace referencia al clásico pasaje de la novela de Miguel de Cervantes Saavedra, Don Quijote de la Mancha, en la que su protagonista lucha contra los molinos de viento. Aquí el ensamble dibuja una inquietante arquitectura sonora en donde se conjugan la sutileza interpretativa, el sobrio manejo en los procesos de relajación y tensión, las mesuradas inserciones de técnicas extendidas y un remate conclusivo con epicentro en el notable solo de batería de Gerald Cleaver.
En el oblicuo Rahonavis –nombre que alude a una pequeña especie de dinosaurio terópodo similar a un ave que vivió a finales del periodo Cretáceo- el trío se entrega a un vuelo colectivo en el que los instrumentos convergen y se separan constantemente en líneas ascendentes o descendentes, cargadas de fuerza interior hasta desaparecer en una coda sigilosa y distante.
La invocación al vuelo se torna aún más explícita en la exquisita pieza que cierra el álbum, toda vez que el título Mongolfiere hace referencia a los hermanos Joseph-Michel y Jacques-Etienne Mongolfier, inventores del globo aerostático.
En síntesis: Pascal Niggenkemper, Simon Nabatov y Gerald Cleaver configuran en Upcoming Hurricane un alegato estético casi tan poderoso e intemporal como el viento pero enunciado con la suficiente convicción, autoridad, imaginación y pericia para llegar a su propio destino creativo.
No se puede cambiar la dirección del viento, pero sí ajustar mis velas para llegar siempre a mi destino (James Dean)
Sergio Piccirilli