Jeff Cosgrove / Frank Kimbrough / Martin Wind: Conversations with Owls
The Owls, Stacks of Stars, I Loves You Porgy, Excitable Voices, Forest Hunters, My Favorite Things, The Shimmer
Músicos:
Jeff Cosgrove: batería
Frank Kimbrough: piano
Martin Wind: contrabajo
Sello y año: Grizzley Music, 2015
Calificación: Dame dos
Los recuerdos afloran a nuestra consciencia porque quieren decirnos algo, porque llevan consigo mensajes para el presente (Robin Lohmann)
La palabra recuerdo, en su definición más aceptada, describe al conjunto de imágenes o hechos pasados que vienen a la mente. Sin embargo, la ciencia afirma que los recuerdos no son imágenes rígidas de algo vivido, sino reconstrucciones complejas que se basan en las interpretaciones de una experiencia pasada pero vistas desde la perspectiva presente.
Los recuerdos –en cuanto a contenido y forma – provienen de las necesidades actuales, se desencadenan en función del ahora y están relacionados de manera directa con la situación vital del momento. En consecuencia, puede aseverarse que los recuerdos no sólo surgen en el presente sino que, además, son vividos en él, puesto que al momento en que el recuerdo viene a nuestra mente deja de pertenecer al pasado para transformarse en un conocimiento vivo, actual y, probablemente, distinto al que le dio origen.
La memoria conserva las experiencias vividas en forma discrecional porque la interpretación del recuerdo no depende de su contenido objetivo ni de lo vivido originalmente, sino que deriva de la forma en que valoramos ese recuerdo desde nuestra visión actual.
Los recuerdos están adheridos a las emociones y, por ello, estas últimas estructuran la memoria y proceden de manera selectiva haciendo que recordemos u olvidemos situaciones, según sea el estímulo sensorial y el estado anímico con los que se relacionan.
A todas luces resulta claro comprender que aquello que recordamos con mayor facilidad no proviene del hecho constituyente en sí, sino que deriva y es consecuencia objetiva del significado que le otorgamos.
Ergo, los recuerdos adquieren relevancia porque les adjudicamos un significado simbólico que -con una adecuada interpretación– nos faculta para elaborar una apropiada mirada retrospectiva del evento fundante pero, también, ayuda a estructurar la propia identidad, permite conectar el pasado con el presente y sirve para proyectarnos a futuro.
Un recuerdo, precisamente, es lo que da nombre y dictamina el curso estético del álbum Conversations with Owls, la nueva producción encabezada por el baterista Jeff Cosgrove en compañía de los experimentados Frank Kimbrough (Frank Kimbrough Quartet, Maria Schneider Orchestra, Ryan Truesdell’s Gil Evans Project) en piano y Martin Wind (Martin Wind Quartet, Ulf Mayer /Martin Wind Duo, Ted Nash Big Band) en contrabajo.
Esas “conversaciones con búhos”, mencionadas en el título del álbum, hacen referencia a la época en que Jeff Cosgrove vivía a orillas del Río Potomac en West Virginia y escuchaba junto a sus pequeños hijos el inescrutable ulular de los búhos. El impacto de aquel recuerdo se conecta con Conversations with Owls mediante un introspectivo y espacioso relato sonoro que parece extrapolar, al lenguaje musical, las cualidades de un ave que se caracteriza por misteriosos llamados en la oscuridad, la enigmática emisión de tonos de baja frecuencia y sus hábitos nocturnos y solitarios.
El baterista Jeff Cosgrove ha venido desarrollando un personal, exquisito y versátil estilo interpretativo a través de participaciones en proyectos que abarcan un amplio rango de géneros musicales. En ese tránsito artístico ha tocado con Long John Hunter, Ingrid Jensen, Rory Block, Rod Piazza & the Mighty Flyers, Bill Watrus, Alan Vezzuti, Stephanie Nakasian, Butch Warren y Hod O’Brien, entre muchos otros. A su sólida formación pedagógica (que incluye estudios con bateristas del calibre de Mike Shepherd, Tony Martucci, Joe Hunt, Matt Wilson y Andrew Cyrille) se agrega una escasa pero fructífera discografía que –además de Conversations with Owls– incluye al álbum Motion Sickness – The Music of Paul Motian de 2011 –trabajo en el que estuvo secundado por John Hebert al contrabajo, el violista Mat Maneri y Jamie Masefield en mandolina– y el superlativo Alternating Current de 2014 en donde compartió créditos con el pianista Matthew Shipp y el contrabajista William Parker.
Su nueva producción discográfica se afinca, mayormente, en los conceptos de composición instantánea e improvisación libre aplicados al formato de piano trío pero adjudicándole una relevancia cardinal a la convergencia de las distintas personalidades musicales de sus componentes en un plano sonoro dictaminado por la cohesión, la intimidad, los espacios y la sutileza.
La apertura, con The Owls, nos sumerge en un paisaje nocturnal resuelto con trazos mínimos y tenue elegancia. Aquí el trío ofrece una interpretación ajena a los dominios del ego en donde cada uno de sus miembros parece tocar lo que la música requiere y aquello que hace sonar bien a los demás.
El magnífico Stack of Stars da inicio con un sobresaliente preludio en contrabajo por parte de Martin Wind que –con el ingreso de los atinados acentos que provee la batería de Jeff Cosgrove y la cristalina exposición del piano de Frank Kimbrough– desemboca en una travesía sonora que va entrelazando diferentes figuras rítmicas, ostinatos en serie y un ejercicio de la improvisación gobernado por el pensamiento melódico.
A continuación, el trío entrega una versión libre del clásico de Gershwin I Loves You, Porgy; tema de la ópera Porgy and Bess estrenada en 1935 y que en origen fuera interpretado a dúo por Anne Brown y Todd Duncan. En esta relectura, lo esencial de la composición permanece inmutable pero con el añadido de un tratamiento etéreo, alambicado y mucho más próximo a la insinuación susurrada que a la estridente explicitez.
Un ejemplar solo de Jeff Cosgrove en batería –ajeno a desbordes y pleno de matices, acentos y colores- oficia como apertura para Excitable Voices. La pieza transita una impronta caracterizada por la improvisación libre, la espontaneidad interpretativa y la ausencia de elementos pre-compuestos pero con una inocultable empatía entre los miembros del trío para el desarrollo orgánico de materiales sonoros heterogéneos.
Forest Hunters dibuja un clima reflexivo e inquietante atravesado por amplios espacios y profundos silencios que acentúan su íntimo temperamento. En un contexto de interpretación superlativo, sobresalen aquí el fúlgido lenguaje pianístico desplegado por Frank Kimbrough y la fenomenal exposición solista en contrabajo con arco por parte de Martin Wind.
En la taciturna recreación de My Favorite Things (tema de Richard Rogers y Oscar Hammerstein perteneciente a la comedia musical The Sound of Music de 1959) ofrecen una respetuosa e imaginativa adaptación, logrando independizarla de la obra madre sin por ello traicionar su esencia.
La conclusión del álbum llega con las variaciones dinámicas, los balanceados contrastes de texturas y el apego al swing de la chispeante The Shimmer.
El trío liderado por Jeff Cosgrove ofrece, en Conversations with Owls, una obra exquisita, estimulante, reflexiva y que, además, ayuda a comprobar la inextinguible conexión entre los recuerdos y la música.
El arte de la música es el que más cercano se halla de los recuerdos (Oscar Wilde)
Sergio Piccirilli