Pase Y Revuelva
Las compañias discográficas en la Argentina parecen, muchas veces, no hacerse eco de lo que pasa mundialmente con la música; me refiero puntualmente a las ediciones, ya sabemos cómo se regula el mercado, y si por año aparece una Norah Jones o una Rita Lee destruyendo a los Beatles, los números de ventas crecen y para qué arriesgar editando discos de músicos que para ellos son desconocidos y que nunca en su vida sintieron nombrar. En ese contexto, Universal nos da una verdadera alegría: nos sorprende y edita nueve discos nueve de artistas relacionados con el pop y el rock, algunos conocidos y otros no tanto. Pase y revuelva:
Ian Brown – Solirazed
El lider de los ya divorciados Stone Roses edita su cuarto disco, primero en la Argentina, logrando un resultado más parejo que en sus anteriores entregas; quizás sea su mejor disco desde Golden Greats; explora dentro de estilos a los que ya nos tiene acostumbrado, estilos que incluyen el pop made in Manchester, algo de psicodelia y el trip hop. Upside Down y Home Is Where The Heart Is, los mejores temas del disco, destacan su voz incofundible, imitada hasta el hartazgo.
Keep What Ya Got, firmada con uno de sus tantos discipulos Noel Gallagher redondea un disco interesante, aunque siempre esperamos más de alguien que lideró la banda inglesa más importante de los noventas.
Jack Johnson – In Between Dreams
Cuarta entrega de este músico procedente de Hawai, buena oportunidad para conocer el mundo de este personaje que también es director de cine (sus películas tienen que ver con el mundo del surf); canciones pop, mixturadas con algo de blues y folk, canciones inocentes que conmueven en la primera escucha, melodías pegadizas, una guitarra acústica como hilo conductor secundada por Adam Topol en batería y Merlo Podlewski en contrabajo, dan como resultado un disco fresco y encantador.
No es quizás su mejor disco pero es lo que hay.
Recomendable.
The Bravery – Idem / Kaiser Chiefs – Employment / The Others – Idem
Parece ser que la falta de ideas es un común denominador en las nuevas bandas de pop- rock. Basàndose en el sonido 70 de las bandas americanas o el post punk, nos invadieron varios grupos de los cuales podemos rescatar muy pocos: Interpol, The Killers o Franz Ferdinand logran tener un toque personal partiendo de de una estructura ya escuchada.
The Bravery en este contexto nos ofrecen un buen disco debut, ecos New Order, sonidos Duran Duran bien 80´s, reminisencias a The Cure, las mismas influencias de las bandas ya mencionadas, sintetizadores rockeros, y el fin casi siempre el mismo: mixturar la pista de baile con el rock. En media hora esta banda de New York ofrece canciones buenas, como tantas y nada más.
Kaiser Chiefs, ¿la nueva sensación inglesa? Son de Leeds, se mueven dentro de los mismos parámetros que los de New York, canciones pegadizas, rápidas, estribillos para tararear, sus influencias son más inglesas (quizás los primeros Blur o Supergrass). No mucho más.
The Others, con sonido más punk y la voz similar a la de Johnny Rotten suenan explosivos por momentos.
Sin dudas la banda más interesante de las tres; sus letras reflejan la angustia que genera la problemática social en su país, la banda más importante del under londinense en estos momentos.
Para seguir de cerca
Como verán, nuevas bandas, pocas ideas.
Eels – Blinking Lights (and other revelations)
Aparece la primer sorpresa; que editen un disco de Eels lo es y encima un disco doble. Músico americano, nacido en Virginia; en 1996 se hizo conocer por un muy buen disco debut llamado Beautiful freak, en 1998 nos deslumbrò con su Electro shock blues, disco influenciado por los acontecimientos que lo rodearon ese año (su hermana se suicida y su madre muere de una enfermedad terminal), dan forma a un disco único.
Luego edita tres discos Daisies of the galaxy (2000), Souijacker (2001) y Shootenanny (2003), hasta llegar a Blinkin Ligths.
Quizás en esta nueva entrega de Mark Everett (su verdadero nombre), encontremos puntos de contacto con el disco editado en 1998. El tema del álbum gira en relación a Dios y a todas las cuestiones relacionadas con el Altísimo. Su estilo son canciones pop con atsmóferas sobrecargadas no precisamente de optimismo, pero tampoco es un disco depresivo.
Contó con invitados de lujo, comenzando por su perro en Last Time We Spoke, Tom Waits presta su voz, gritos más precisamente en Going Fetal, Peter Buck guitarrista de R.E.M presta sus servicios en To Lick Your Boots, y el arpista John Sebastian colabora en Dusk: A Peach In The Orchard. Los fantasmas del pasado parecen acecharlo de nuevo y dan como resultado su disco mas intimista.
“La familia con la que crecí, había desaparecido por completo en 1998. Tuve que enfrentarme a ello mientras hacía -Electro shock blues-. Pero es algo que nunca va a cambiar y sus implicaciones son demasiado poderosas en mi vida,”
Su desgracia no termina ahí: el 11 de septiembre, en el atentado a las torres gemelas, pierde a su prima.
“Hay una especie de sonido fantasmal en Blinking Lights,” dice Everett, “tal vez porque vivo con un grupo de fantasmas¨.
Feist – Let It Die
Detrás de Feist se esconde Leslie Feist una chica procedente de Toronto. En su currículum podemos descubrir que su primer banda se llamó Placebo (sólo el nombre en común con la banda de Brian Molko), con la cual llegó a telonear a los Ramones; participó en Peaches, aportó su voz para los Broken Social Scene y Gonzalez, colaboró en el último trabajo de los King of Convenience y con Jane Birkin.
Después de un modesto disco debut, Monarch, tras cinco años aparece Let It Die, disco tranquilo y reposado que se mueve entre el soul y el folk; económico en arreglos, sencillo y encantador, en ocasiones nos recuerda a la parte más crooner de Beth Gibbons.
Un buen disco para los que disfruten de las canciones susurradas más que cantadas.
Weezer – Make Believe
Weezer es una de las pocas bandas que mantienen un sonido que los identifica y los diferencian. Luego del mejor disco de su carrera, Weezer (1994), el de la tapa azul, la banda liderada por Rivers Cuomo, supo darnos -con aciertos y errores- discos sin grandes sorpresas pero honestos al mismo tiempo.
En esa línea se encuentra el último trabajo de la banda Make Believe, la dosis de humor característica de la banda, amores desencontrados, sonido definido y compacto, riffs de guitarra personales y simplicidad en el formato de los temas, dan como resultado que la Weezer siga vigente, sin deslumbrar y lejos de lo que creemos a esta altura fue su techo: aquel disco, sí, el de tapa azul.
Thirteen Senses – The Invitation
Banda inglesa post-Radiohead, con todo lo que eso implica: melancolìa que empalaga y que no descubre nada.
En la línea de Travis, Muse y sobre todo Coldplay (por no decir que hasta que no aparece la voz, parece que estamos escuchando la banda de Chris Martin), este cuarteto debuta con un disco aburrido y predecible, sinceramente para el olvido.
Cristian Woinarowski.
