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Chris Gestrin/Ben Monder/Dylan Van Der Schyff: The Distance

Ferns, Treacle, #47, Dark Engine, Treant, Views From the Road, Extrinsic, The Distance, Voice In the Night, Second Approximation

Músicos:
Chris Gestrin: piano
Ben Monder: guitarra eléctrica
Dylan Van der Schyff: batería, percusión
Songlines, 2006

Calificación: Buena gente (¿o gente aburrida?)

Es absurdo dividir a la gente en buena y mala.
La gente es tan sólo encantadora o aburrida
(Oscar Wilde)

De antemano le digo que califico este disco deexcepción
¿Se entendió?

Es que tengo un caramelo mu-mu en la boca y vio lo que pasa…

Se pega en los dientes… ehhhh…

Es entonces cuando uno se ve en la obligación de deslizar la lengua como si fuese una pitón tratando de escarbar entre las piezas dentarias y así quitar esa masa pegajosa…

Parece plasticola… ya lo tengo…

Ahora hago la gran Gene Simmons… ¡Listo!

La zona bucal (y adyacencias) ha sido liberada…

Decepción… eso dije. Decepción.

The Distance fue grabado en vivo en el Western Front en Vancouver, Canada.

The Distance es un proyecto que reune al guitarrista Ben Monder, al pianista Chris Gestrin y al baterista y percusionista Dylan Van der Schyff. Los dos últimos son canadienses.

The Distance aburre.

El aburrimiento aburre.

El aburrimiento es un estado emocional de insatisfacción. Es un momento en el que todo se percibe como insulso o vacío y en donde las experiencias gratificantes parecen haber quedado detenidas en el tiempo…

Ese estado puede surgir en cualquier momento: cuando estamos aprisionados por la rutina… o simplemente después de escuchar un disco (¿como éste?).

Los síntomas del aburrimiento se expresan a través del cansancio que aparece antes de realizar un esfuerzo o en la manifiesta incapacidad de pasar de la intención a la acción…

¿Será por ello que no tengo ganas de seguir con el comentario?

¿Es ésa una clara expresión sintomatológica de aburrimiento?

Trataré de continuar…

Introduzco otro caramelo en la cavidad bucal.

Después de mi pegajosa experiencia con el caramelo mu-mu, decido optar por un mucho más maniobrable caramelo media hora.

¡Glup! ¡Uy! Me lo tragué entero…

No es para menos… acabo de leer un comentario sobre este disco que dice (textual) : “Este es un trío poderoso, por momentos cerebral y en otros cinemático, pero siempre fascinante".

Con o sin comentario (textual) me aburro.

Quien está aburrido siente que ya todo está dicho.

Como decía el escritor español Ricardo León: “El aburrimiento es la suprema expresión de la indiferencia”.

En un ciclópeo esfuerzo logro apartarme de la inercia de la monotonía y digo…

El organizador del Vancouver International Jazz Festival, Ken Peckering y el director del sello Songlines Tony Reif, promovieron un concierto con el trío en cuestión (Gestrin, Monder y Schyff). De ese proyecto surgió The Distance, que como ya les adelanté… me aburrió.

Básicamente este disco es una extensa improvisación.

Una larga zapada que no pretende un impacto directo, ni indirecto, ni ningún otro…

Corrijo: una zzzapada.

Dylan Van der Schyff es una de las figuras predominantes de la nueva escena del jazz con epicentro en Vancouver. Ha participado en numerosos proyectos grupales originarios de Canadá como la NOW Orchestra y Talking Pictures, además de colaborar con Peggy Lee y Brad Turner, entre otros. Más recientemente y tras cruzar la frontera de su Canadá natal, ha trabajado con Dave Douglas en su exquisito Mountain Passages y también con Louis Sclavis, Barre Phillips y Joe Lovano.

Chris Gestrin también proviene de la escena de Vancouver. Hizo su aparación hacia fines de la década del ’90. Luego de su paso por el Berklee College, se dedicó principalmente a desarrollar su carrera solista, cuyo exponente más destacado parece ser el álbum Stillpoint.

Ben Monder es el más conocido de los tres integrantes, quizás a causa de haber transitado la mucho más conocida escena de New York. Monder es egresado de la University Of Miami y el Queen College. Pese a su juventud, como sesionista, ha colaborado con una gran variedad de músicos que incluye a Marc Johnson, Lee Konitz, Paul Motian y Tim Berne. Ha integrado, también, la Orquesta de Maria Schneider, la Orquesta de Jazz del Carnegie Hall, los Guachos y el Kenny Wheeler Large Ensemble. Inició su carrera como líder en 1995 con el álbum Flux.

Su más reciente trabajo data de 2005: el interesante Oceana.

The Distance abre con Ferns. Su relajada introspección promete mucho más de lo que en realidad consigue, conviertiéndose en un ejemplo cabal de lo que ofrece este disco en su conjunto.

El frenético Treacle es tan exacto como confuso. No podemos afirmar a qué dirección se orienta… si es que lo hace en alguna dirección.

#47 es de una calma pastoral y con pasajes climáticos tan precisos como insípidos

En Dark Engine nos encontramos con una paleta de sonidos exploratoria y angular proporcionada por Monder y adornada con la variedad de matices percusivos de Van der Schyff.

Pese a las amenazas, no hubo que lamentar víctimas.

La monótona precisión de Treant nos obliga a parpadear intensamente para evitar caer en estado cataléptico.

El piano de Gestrin comanda las acciones en Views From the Road. Ahora parece que sí… pero no.

En Extrinsic, el piano preparado de Gestrin y la guitarra distorsionada de Monder construyen un crucigrama de sonidos que de tan perfecto provoca indiferencia.

El único esfuerzo compositivo en términos convencionales corresponde al tema que da título a este disco. The Distance nos recuerda inmediatamente a la primera época de Pat Metheny.

Fue hace algun tiempo, ¿no?

Voice In the Night nos obliga a accionar repetidas veces el “play”. No hay caso, el tema se niega a empezar. Parece que es así.

Second Approximation sigue la línea anterior pero con mayor extensión, lo que requiere un poco más de paciencia y ayuda a fortalecer nuestro poder de resistencia a los embates del aburrimiento, casi como si fuese un rito iniciático.

No quiero quedarme con un sabor amargo…
Ya conocemos los resultados con los caramelos…
Mejor pasemos al chicle. No puede fallar Perfecto… ¡ahí va!
Rico, pero… un momento…
Siento como un tropel que avanza desde el fondo de mis entrañas…
Algo grande está por suceder.
Lo imaginaba… el chicle era laxante…
Tenía algo más para decir sobre este disco pero…
Usted sabrá disculparme… pero creo que en los próximos minutos estaré bastante ocupado…

Síntesis:
The Distance es un disco que persigue la exactitud pero se olvida de ser interesante…

Conviene siempre esforzarse más en ser interesante que exacto, porque el público lo perdona todo menos el aburrimiento.
(Voltaire)

Sergio Piccirilli

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