El Japonés de la Atlántida
Pero sólo de aspecto, ya que el violinista (y bastante más) Eyvind Kang nació en Corvallis, Oregon, Estados Unidos. Comenzó sus estudios musicales a la edad de seis años dedicándose al violín y a la tuba.
Es convocado permanentemente por íconos como John Zorn, Wayne Horvitz y (bueno… al menos alguna vez lo fue…) Bill Frisell.
El falso nipón es un amante de la literatura y filosofía del Renacimiento. Cuenta la realidad que en una librería de Amsterdam, Holanda, compró Cantus Circaeus, de Giordano Bruno, uno de los preferidos de Kang. Y a partir de ahí, pintó el proyecto: una suerte de Oratorio de título Athlantis.
Por supuesto que, entonces, se necesitaban voces. Y allí están entonces nada menos que Mike Patton y Jessika Kenney. Y también el Ensemble di Ottoni di Modena y el Coro da Camera di Bologna.
Como conductor, Aldo Sisillo.
El técnico del equipo, por supuesto, es Eyvind Kang.