Brevario

No Puede Pararrrrrrrrrrr…

No nos referimos al sentimiento que se grita en toda tribuna futbolera toda (y más que nada en la de la Academia Racing Club); no… el que no puede parar es John Zorn, que en su rol de dueño del sello discográfico Tzadik, sigue inundando de discos las bateas y vaciando nuestros raleados bolsillos.
Brevísimamente, algunas de las últimas ediciones:

Anthony Braxton en saxos, Milford Graves en percusión y William Parker en contrabajo, ofrecen Beyond Quantum. El álbum, que cuenta con la participación de Bill Laswell en la grabación y mezcla, muestra a las claras que las bondades de estos tres artistas de excepción se tomó vacaciones a la hora de elegir los títulos de los temas, a saber: First Meeting, Second Meeting, Third Meeting, Fourth Meeting y Fifth Meeting. Eso sí… cuando tocan… te aplastan.


El trío Medeski, Martin & Wood fue el elegido por Don Juan para Zaebos: Book Of Angels Vol. 11, donde re-interpretan material de Masada, el cuarteto… trío… sexteto… bueno… Masada… no me la compliquen…
La cuestión es que John Medeski en teclados, Billy Martin en matería y Chris Wood en bajo, se meten con temas que ya han conocido diversas versiones. ¿Los títulos? Cómo no… Zagzage, Sefrial, Agmatia, Rifion, Chafriel, Ahaij, Asaliah, Vianuel, Jeduthun, Malach ha-Sopher y Tutrusa’i.
Bueno… ustedes insistieron…

Bérangère Maximin nació en 1976 la isla de Reunion, una colonia francesa en el Océano Índico. A los 16, se trasladó a Francia y desde el 2002, reside en París. Participó coimo cantante en bandas de rock y world music y también estudió música electroacústica con Denis Dufour en el Conservatorio Perpignan. La niña, que parece tener lo suyo (que no es poco), ha debutado discográficamente con Tant que les Heures Passent, un trabajo realizado en soledad en su propio estudio con su voz y diferentes tapes. Y bueno… ya que insisten… los temas: Tant que les Heures Passent, Boudmo, Ce Corps Vil, Part one and Part two, Voyagues Morphologiques, Si Ce N’est Toi y La Méchanique des Ombres.

Finalizamos (aunque créanme que hay más) con un australiano: el compositor e instrumentista Anthony Pateras. Para Chromatophore, su segunda entrega para el sello de Don Juan, convocó al Ensemble of the Australian National Academy of Music, el Ear Massage Percussion Quartet, la Australian Chamber Orchestray y, en carácter de solistas, Natasha Anderson, Erkki Veltheim y el propio Pateras, que se hace cargo de la conducción, voz, electrónicos, piano preparado, Doepfer A-100 y computadoras.
¿O ustedes se creían que en Australia sólo existen los canguros y el rugby, ah?

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