Hiromi: Spiral
Spiral, Music for Three-piece-Orchestra, Old Castle By the River In the Middle of the Forest, Love and Laughter, Return of Kung-fu Champion.
Músicos:
Hiromi Uehara: piano y teclados
Tony Grey: bajo eléctrico
Martin Valihora: batería
Telarc, 2006
Calificación: Más de lo mismo.
Hiromi está de moda…
Si escuchás a Hiromi estás in y si no, estás out.
Y la verdad es que estoy in pero con unas ganas de out que no se aguantan…
Su exótica belleza y la divulgación boca a boca de que en escena Hiromi es incandescente, conjuga valores de seducción enquistados en el inconciente colectivo de los que resulta difícil escapar.
Casi como un canto de sirena.
Hablo de las que están en el mar y no de la que usan los bomberos. Aunque estos últimos puedan hacer falta sobre todo si es cierto aquello de las incendiarias actuaciones de esta muchacha…
Hiromi es una especie de sex symbol y uno, que tambien lo fue, (¡?) comprende la situación perfectamente.
Aun cuando el paso de los años nos haya hecho más “symbol que sex”.
Sus dos primeros discos Another Mind y Brain cosecharon todo tipo de premios, galardones y condecoraciones diversas.
Desde varias menciones como álbum de jazz del año (no importa cuál) y revelación del año a un Martín Fierro, dos nominaciones al Oscar, una candidatura a concejal en la Municipalidad de Venado Tuerto, Miss Simpatía en el carnaval de la sociedad de Fomento 9 de Julio de Loma Grande y empleada del mes de McDonald’s.
Todo sustentado en una campaña perfectamente montada por la prensa amarilla… y… suena lógico…
Tengamos en cuenta que Hiromi nació en Shizuoka, Japón…
Pese a ello y tal vez por alguna confusión geográfico-musical en el estilo de Hiromi, hallamos rastros de Corea…
También resulta comprensible, ya que alrededor suyo se fue Armando algo bastante Chick…
Hiromi dice: “Me encantan Bach, Oscar Peterson y Litsz. También me gusta gente como Sly and the Family Stone, Dream Theater y King Crimson… pero recibí mucha inspiración de deportistas (SIC) como Carl Lewis y Michael Jordan”. (¿El SIC sera por el San Isidro Club?)
No están lejos los tiempos en que algún músico afirme que sus influencias han sido Batocletti, el Bocha Maschio o el Ropero Díaz.
Hiromi tiene apellido: Uehara… está muy bien que no lo use.
Estudió piano en el Yamaha School. Dice que debutó a los 12 años (suponemos que se refiere a la música); a los 14 estuvo con la Czech Philharmonic de Checoslovaquia (en este caso… imploramos que se refiera a la música). Pero todo cambiaría a los 17, cuando se contactó con Chick Corea (ahora entiendo cuando dicen que “Corea es un grande”).
Luego de componer música para las publicidades de compañías como Nissan durante un par de años, se trasladó a Estados Unidos para estudiar en el Berklee College of Music de Boston.
Luego llegaron los discos, los premios y todo el furor de la moda de Punta del Este (es oriental, recuerden)
En su empresa (nunca más adecuado el término) no está sola. La acompañan el baterista Martin Valihora y Tony Grey en bajo eléctrico. Este último, considerado unánimemente como la revelación de la década en su instrumento (todo lo que rodea a Hiromi parece ser a lo grande). Además, Grey ostenta el privilegio de llamar tío a John McLaughlin (típico de la relación que mantienen los hijos del hermano/a de otra persona).
Y honor que sólo queda reservado a unos pocos… sobrinos.
Recién salido del horno llega el tercer y más aclamado disco (¿ya?) de Hiromi: Spiral… (título aterrador… para los mosquitos).
Hiromi, por suerte, a diferencia de su trabajo anterior, toca piano principalmente y reserva los sintetizadores para el último track, Return of Kung-fu Champion. Algo así como El Retorno del Dragón pero con Jackie Chan reemplazando a Bruce Lee.
Si uno no lo toma demasiado en serio, hasta puede llegar a disfrutarlo. Me refiero a Jackie Chan…
Hiromi toca fenómeno y a gran velocidad, comprobando cuáles son las influencias recibidas de… Carl Lewis.
Bien Valihora y muy bien Grey tocando en un estilo que nos recuerda inmediatamente a Matthew Garrison (al igual que él, toca bajo de 5 cuerdas) y que además ha sido bajista de tío John.
La edición especial de Spiral trae un DVD con la presentación en vivo de un tema de Brain: Kung Fu World Champion…
Una zapada feroz que tiene mucho más de marcial que de arte.
El disco está bien y estaría mucho mejor si no fuese tan… tan… predecible, anunciado, previsible, anticipable, conocido, imaginable, presagiado, corriente, pronosticable y un poquitito aburrido, frecuente, repetido, usual, común, soporífero, tedioso, ordinario, habitual, presumible, pregonado… pero salvo eso, está bien.
Desde el inicio, uno sabe que el asesino es el mayordomo.
No hay misterios… ni intrigas, ni nada.
Síntesis: Hiromi es una moda. El disco se llama Spiral. Y las modas, como los espirales, se hacen humo en poco tiempo.
Sergio Piccirilli.
