Anthony Burgess: La naranja mecánica
(Ediciones Minotauro)
– Cuando salgas de aquí -dijo el min- no tendrás problemas. Nos ocuparemos de todo. Un buen empleo y un buen sueldo. Porque estás ayudándonos.
– ¿De veras?
– Siempre ayudamos a nuestros amigos, ¿no es así? -Y entonces me estrechó la mano y un veco crichó: "¡Sonría!"; y yo sonreí como besuño sin pensarlo, y entonces…
